La Comisión Multisectorial para el Estudio del Fenómeno El Niño (ENFEN) ha mantenido un –estado de alerta constante sobre el Fenómeno El Niño Costero. Este fenómeno, impulsado por la evolución de El Niño en el Pacífico central y la variabilidad climática regional, parece estar extendiéndose hasta fines del verano. Sin embargo, más allá de las lluvias y sequías asociadas, uno de los impactos menos reconocidos, pero igualmente significativos es el aumento en la proliferación de plagas agrícolas, como la mosca de la fruta.
Con el Fenómeno El Niño, se espera la aparición de plagas que pueden devastar grandes extensiones de cultivos. Entre ellas, la mosca de la fruta es una de las más preocupantes. Las condiciones cálidas favorecen su reproducción y aumentan su presencia en las zonas agrícolas. Esta plaga, conocida por generar pérdidas significativas en las cosechas y restringir las exportaciones, es considerada una amenaza seria para la seguridad alimentaria y la economía local.
Según SENASA, el ciclo biológico de la mosca de la fruta se ve acelerado con el aumento de las temperaturas. Mientras que en condiciones normales su ciclo puede durar entre 30 y 35 días, durante el invierno atípico impulsado por Fenómeno El Niño, este ciclo se reduce a menos de 25 días. Esto significa que, en tan solo un mes, se pueden producir múltiples generaciones de moscas, multiplicando así el impacto de la plaga. Además, cada hembra puede depositar hasta 700 huevecillos, infectando numerosas frutas y amplificando aún más el daño económico.
Ante esta situación, es crucial implementar estrategias efectivas de monitoreo y control de la mosca de la fruta. Una herramienta destacada en este sentido es el uso de atrayentes como Cera Trap®. Este producto innovador, disponible en el mercado desde hace más de 15 años, ha demostrado ser una alternativa eficaz y ecológica para el monitoreo y la vigilancia en programas de manejo de plagas.
Cera Trap® se destaca como una solución versátil y efectiva para el monitoreo y control de la mosca de la fruta. Este producto puede ser utilizado en trampas caseras o mosqueros tipo Mc Phail, sin necesidad de insecticidas. Su larga persistencia en el campo, que puede llegar hasta los 3 o 4 meses, lo convierte en una opción duradera y conveniente.
Cera Trap® funciona emitiendo compuestos volátiles, principalmente aminas heterocíclicas y ácidos orgánicos, que son altamente atractivos para las moscas adultas, especialmente las hembras. Colocado dentro de las trampas, este atrayente facilita la captura de los insectos, ayudando así a romper el ciclo biológico, reduciendo la población y mitigando el impacto en los cultivos.
Cera Trap® puede utilizarse tanto para monitorear como para el control masivo de la mosca de la fruta. Se sugiere una densidad 10 a 20 trampas por hectárea para el monitoreo, y 50 a 80 trampas por hectárea para el trampeo masivo (control), dependiendo de la presión de la plaga y el tipo de cultivo. Además, se recomienda un seguimiento constante, complementando otras acciones de control de plagas.
Es importante destacar que el control de la mosca de la fruta debe ser parte de un sistema integrado de manejo de plagas, que incluya medidas como el recojo de frutos y la eliminación de hospederos. En caso de que las trampas se ensucien o contaminen, se recomienda cambiar o reemplazar la solución para mantener su eficacia. No se recomienda mezclar ni diluir Cera Trap® con agua. Cera Trap® ofrece una solución ecológica, segura y respetuosa con el medio ambiente para proteger los cultivos de esta plaga devastadora. Puedes conocer más de Cera Trap® en el siguiente enlace: https://www.farmex.com.pe/producto/cera-trap/
Fuentes: SENAMHI / El Peruano / Agraria.pe