Estrategias para el Manejo Sanitario del Palto en el Perú

Estrategias para el Manejo Sanitario del Palto en el Perú

El manejo sanitario del palto es crucial para asegurar cosechas exitosas y de alta calidad. Implementar estrategias fitosanitarias adecuadas no solo protege la inversión del agricultor, sino que también garantiza la sostenibilidad del cultivo a largo plazo y la capacidad de competir en mercados exigentes.

Principales Amenazas Fitosanitarias en el Palto

El cultivo de palto en el Perú enfrenta diversas amenazas sanitarias, incluyendo hongos, insectos, ácaros y otros patógenos, que pueden reducir la producción y la calidad de la fruta. Entre las principales se encuentran:

  • Pudrición radicular o tristeza. Enfermedad causada por el oomiceto Phytophthora cinnamomi, un patógeno habitual en los suelos de las plantaciones de palto. Causa raíces oscuras y quebradizas, con pudrición húmeda. En la medida que avanza se forma un cancro en la base del tronco junto con un exudado. El árbol produce hojas pequeñas, pálidas, amarillentas y de puntas quemadas, además de frutos pequeños; luego viene la defoliación y la declinación gradual de la planta.
  • Muerte regresiva. Enfermedad causada por el hongo Lasiodiplodia theobromae. Produce necrosis de ramillas exteriores, muerte descendente o regresiva de las ramas, y pudrición del pedúnculo del fruto que causa la posterior pudrición del fruto.
  • Pudrición de flores y frutos. Enfermedad causada por el hongo Botrytis cinerea. Causa la pudrición de flores con presencia de una esporulación grisácea, la caída de flores y frutos recién cuajados, e incluso causa la pudrición de frutos ya desarrollados.
  • Antracnosis. Enfermedad causada por el hongo Colletotrichum gloeosporioides, causa manchas circulares en los frutos con el centro hundido o con grietas. Puede atacar también hojas y ramas.
  • Queresas. Hay una gran diversidad de queresas que ataca a las ramas, hojas y frutos del palto, formando colonias y debilitando la planta. Entre ellas, un grupo muy importante es el de las queresas armadas de la familia Diaspididae, tales como Fiorinia fioriniae, Hemiberlesia spp. y Pinnaspis aspidistrae. Otros grupos importantes son las queresas no armadas (familia Coccidae), las queresas móviles (familias Orthezidae y Margarodidae), y las cochinillas harinosas (familia Pseudococcidae).
  • Trips. Insectos pequeños y alargados, de color amarillento o negro. Atacan flores y raspan los ovarios, que al crecer forman costras en los frutos. Los principales trips son Thrips tabaci, Frankliniella spp., Heliothrips haemorrhoidalis y, últimamente, Scirtothrips dorsalis.
  • Bicho del cesto. La especie es Oiketicus kirbyi. El macho es una polilla gris y alada, la hembra está en forma de larva dentro de un cesto hecho de hilos y rastrojos. Las larvas realizan comeduras en forma de orificios irregulares y circulares en las hojas, reduciendo la capacidad fotosintética de la planta.
  • Chinche del palto. Es un pequeño chinche, Dagbertus minensis, que realiza picaduras que afectan brotes y flores, e incluso causa la caída de frutos pequeños.
  • Arañita roja. Ácaro de la especie Oligonychus punicae, que se alimenta de los jugos celulares y puede causar una importante defoliación de la planta.

 Estrategias Integrales para el Manejo Sanitario del Palto

Un manejo sanitario efectivo del palto requiere un constante monitoreo del campo y un enfoque integrado que combine diversas tácticas de control y prevención:

Planificación de la plantación

Es importante la selección de patrones adecuados resistentes a enfermedades radiculares y suelos salinos, variedades adaptadas a la zona, distanciamientos adecuados, suelos con buen drenaje y no salinos, y agua con bajo contenido de cloruros.

Control cultural

El manejo agronómico incluye seleccionar plantas libres de enfermedades radiculares y virósicas, buen manejo del riego para evitar que se moje la base del tronco (evitar pudrición radicular), adecuada fertilización de fósforo y potasio, incorporación de materia orgánica, eliminación de malezas hospederas de trips, podas sanitarias para reducir queresas, y el recojo de hojas, frutos y ramas caídas o afectadas luego de la cosecha (reducción de antracnosis),

Control físico y mecánico

Es importante que la poda de formación resulte en un árbol con varias ramas principales desde la base para un menor impacto de Lasiodiplodia y un descope del árbol para mayor aireación. Y complementar con un lavado de plantas para un mejor control de queresas, cirugía de cancros y la quema de ramas secas y caídas.

Control biológico

El objetivo es la protección y el fomento de enemigos naturales de queresas (avispas parasitoides), de enemigos naturales de ácaros (insectos y ácaros predatores) y de enemigos naturales de trips (chinches, crisopas y coccinélidos). También es importante el uso de Trichoderma spp. para el control de hongos patógenos.

Control químico

Utilizar únicamente productos fitosanitarios autorizados, aplicando las dosis recomendadas y respetando los plazos de seguridad o carencias. Usar siempre el equipo de protección personal, realizar el triple lavado a los envases vacíos y disponerlos en los lugares designados por las autoridades.

Recomendaciones de productos dentro de un programa integral de manejo sanitario

Luego de concluida la cosecha del palto se inician las primeras prácticas para el manejo sanitario de la siguiente campaña. Lo principal es el control de enfermedades del suelo como la pudrición radicular causada por Phytophthora. Es recomendable la aplicación por sistema de riego o vía drench de HIELOXIL MIX 72, cuyo metalaxyl es un fungicida de fácil absorción radicular y específico para el control de esta enfermedad. También tenemos la alternativa de TOTEM (fosetil aluminio) que se puede aplicar en aspersión foliar, y gracias a su rápida absorción y capacidad de moverse de manera sistémica y descendente puede proteger las raíces de la planta.

Al momento de la poda sanitaria se inicia el control de la muerte regresiva causada por hongos de la madera como Lasiodiplodia. Esta enfermedad aprovecha las heridas causadas por la poda o el estrés para ingresar y diseminarse por el campo. Las podas eliminan ramillas secas y ramas con síntomas de cancros o de pudrición interna en su xilema. En estos casos, se recomienda el uso de SARGON, un fungicida formulado con prochloraz, de acción por contacto y traslaminar, lo que permite que penetre profundamente en el tejido afectado, protegiendo los brotes y las partes vitales de la planta.

También se realiza un control de queresas al inicio de campaña. En este caso es importante el empleo de productos específicos y la rotación de ingredientes activos para evitar el desarrollo de resistencia. CLOSER 240 SC, es una molécula de última generación, el sulfoxaflor, de eficaz control de queresas armadas y cochinillas harinosas. Puede rotarse con otro producto muy específico: BATAVIA 150 0D, cuyo ingrediente activo, spirotetramat, es de amplio movimiento dentro de la planta. El control se complementa con reguladores de crecimiento específicos para estados inmaduros de queresas como SPECIAL (pyriproxyfen) o TRIUNFO (buprofezin).

El control del bicho del cesto se realiza con productos selectivos como INTREPID 2F, formulado con methoxyfenozide, un regulador de crecimiento específico para larvas de lepidópteros. También es conveniente el empleo de insecticidas de efecto cruzado, como CORAGEN SC (chlorantraniliprole) y ABSOLUTE 60 SC (spinetoram), es decir, productos de muy efectivo y residual control; pero que respetan enemigos naturales y fauna benéfica. Este tipo de productos de efecto cruzado también se emplean para el control de trips. Nos referimos al caso de PREZA (cyantraniliprole).

Finalmente, para el control de la arañita roja la estrategia es emplear al inicio de campaña, o máximo hasta el inicio de floración, productos de choque que reduzcan rápidamente la población de ácaros y nos brinden larga residualidad. Productos como ACRAMITE 480 SC (bifenazate), y complementar luego con productos más específicos como CARILE 112 SC, un regulador de crecimiento formulado con etoxazol.

Asimismo, es vital que los agricultores se mantengan actualizados con las mejores prácticas agronómicas y reciban capacitación constante en el manejo fitosanitario del cultivo. Aquí, es necesaria la colaboración con instituciones de investigación y organismos técnicos, como el SENASA y las universidades, que contribuye al mejoramiento constante de estos programas de manejo sanitario.

El manejo sanitario del palto en el Perú es un proceso multifacético que requiere un enfoque preventivo, estratégico y adaptado a las condiciones locales. Al adoptar estas prácticas, los productores pueden proteger sus cultivos, mejorar la calidad de sus productos y contribuir a la sostenibilidad de la industria paltera peruana.

Fuente: Sarmiento Mata, Jorge. Curso de Manejo Integrado de Plagas de Frutales Subtropicales. Maestría de MIP, Universidad Nacional Agraria La Molina.

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